En la decoración del hogar a la iluminación nunca se le brinda la debida importancia. Es por eso que se ven tantas casas decoradas de formas muy bonitas pero iluminadas de las peores maneras. No hay secretos; la iluminación mejora el color, ofrece una sensación de calidez y de vida y hace que hasta una habitación desagradable sea acogedora.
La iluminación ambiental
La luz ambiental es la capa de iluminación básica. Además de permitirle a la gente ver los objetos, muebles y la disposiciones de las habitaciones, la luz ambiental, junto a la artificial, es el componente general que le va a ayudar «abrir el horizonte» para que su hogar no sea percibido como una caja hermética.
La iluminación ambiental puede ser de dos tipo:
- Iluminación directa: Aquella que ingresa a los ambientes y se desploma sobre todo lo que hay en ellos. Genera calor, es intensa y muy activa.
- Iluminación indirecta: Aquella que se produce cuando la luz ambiental directa choca contra una pared, los muebles, cortinas, alfombras o sobre algún espejo, entre otras cosas. Este tipo de luz se caracteriza por ser tenue y pasiva.
Como vemos, a la hora de pensar cómo puedo decorar una habitación recuerde estos dos tipos de luz ambiental. Por ejemplo, todos sabemos que la luz en las cocinas es fundamental. Por lo tanto, para realzar su iluminación, un truco puede ser colocar justo en donde «golpea» la luz directa una isla con X características. Al chocar la luz contra ella, la iluminación de su cocina se verá ampliada en proporciones sorprendentes; ¡Los resultados en algunos casos pueden parecer mágicos!
Por supuesto que este tipo de luz sólo dura algunas horas. Por eso existen múltiples luces artificiales que imitan la calidez de la luz ambiental. Las lámparas de techo ofrecen la gama de iluminación difusa requerida para la iluminación ambiental suave. Función parecida la cumplen las Upligths suspendidas o montadas y las luces encastrables integradas al techo.
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