Psicología del color en la Decoración y en el Diseño

El color es un lenguaje universal, que estimula las emociones, las formas y las culturas del mundo. La vida de todo el mundo se enriquece gracias a ellos. El color puede ser una mejora tremenda cuando te gusta, o causar un agotamiento de la energía si no lo hace.

Explora el impacto que los colores tienen en nuestros espacios de vida y cómo podemos responder a su presencia. Considere cómo el color y la textura  pueden actuar como su guía. El color puede ser vibrante e impactar, o tranquilo y relajante, todos nacemos con nuestra respuesta personal hacia él. Si un color te molesta, deshacerse de él. El color es poderoso y personal, cada uno lleva su propia paleta de colores única.
Los colores en nuestra percepción se han convertido en expresiones comunes. Nos referimos a los estados de ánimo «negros» u «oscuros», por ejemplo. Veamos a continuación algunos Tips básicos sobre la psicología del color para tener en cuenta:

  • La forma en que vemos el color puede ser muy diferente a la de otra persona, y lo que una persona puede considerar brillante y colorido, otras pueden considerarlo chillon.
  • Cada color básico incluye un amplio espectro de tonos y matices. Manténgase dentro de la paleta en la que los colores se sientan atraídos.
  • El color puede nutrir tu alma como la comida alimenta el cuerpo. Determine qué colores son tus favoritos. Usted no tiene que empapar las paredes en planos escabrosos de tonos saturados para conseguir un sentido del color. Los pequeños detalles marcarán el ritmo del espacio; ¡ téngalos en cuenta!

  • Déjate guiar por lo que te gusta y disfruta del resultado. Elegir los colores para el hogar puede ser un emocionante viaje de descubrimiento.

  • El color crea el estado de ánimo. El color tiene un impacto psicológico de gran alcance y pueden influir en nuestro estado de ánimo. Algunos colores son considerados como curativos, haciendo que nos sintamos felices y bien, mientras que otras tienen un impacto negativo, la inducción de la melancolía, por ejemplo.
Por ejemplo, el uso de coloridas flores en el hogar ilustra los poderes que tiene el color para mejorar el estado de ánimo. Flores de color amarillo van a crear un ambiente luminoso y feliz, mientras que los arreglos de color blanco o verde, crean una sensación de calma y serenidad.

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