Un jardín además de darle colorido a una vivienda es un lugar que invita al esparcimiento y el ocio, sobre todo en primavera y verano. Para su decoración es importante tener presente el tipo de espacio del que se dispone y sobre todo el tiempo con el que se cuenta para su cuidado, ya que para tenerlo en buenas condiciones es esencial dedicarle horas de trabajo.
Muchas personas cuando se compran una casa y ésta tiene un trocito de jardín no saben muy bien cómo decorarlo. Así que acaban por rellenarlo de plantas y flores sin mucha idea de si son las mejores para ese suelo o la zona en la que van a ir ubicadas. Y por descontado, ni se cuestionan que el principio fundamental para crear un jardín sea conseguir un equilibrio entre la armonía y la utilidad material.
Este espacio abierto ejerce una gran influencia en el microclima y la higiene de las habitaciones de la casa. El verdor de la hierba y las plantas contribuye a refrescar el ambiente, desempeña un papel importante en el equilibrio de la humedad del aire y participa de forma muy favorable en el ciclo del agua en el naturaleza.
- Ocio y esparcimiento
En una vivienda con jardín, este ejerce una función de esparcimiento y ocio importante. De este modo, podrá responder a las necesidades de descanso activo de los adultos y de los niños que necesitan un espacio para jugar. Antes de dar forma a su trozo de naturaleza en casa debe tener presente el tiempo que va a disponer para cuidarlo, los gastos que puede asumir y lógicamente su gusto personal. Además del tamaño y tipo de terreno, de su relación con la casa y el entorno y uso que usted le vaya a dar.
A la hora de crear y concebir un jardín existen dos alternativas, aunque por regla general, ninguna de ellas se suele encontrar en su estado totalmente puro. Por un lado, está la opción de crear un jardín artificial y por otro, la de dar forma y vida a un espacio exterior en el que se respete al máximo posible la naturaleza. Si su idea coincide con la primera alternativa, es conveniente que cultive especies vegetales de crecimiento rápido para que alcancen pronto su tamaño definitivo.
Lo mejor que puede hacer es formar un macizo de rosales polyantha, begonias o cinerarias en medio de un césped muy cuidado. Este tipo de jardines suele ser la prolongación del salón o la entrada de la casa. Además de las plantas, para su decoración se suelen utilizar muebles de madera o mimbre y piedras ornamentales.
Si lo que desea es respetar al máximo la propia naturaleza, su objetivo será conseguir la mejor integración de los elementos naturales con el jardín. Es algo así como reunir en un pequeño espacio todo lo que nos gusta encontrar en pleno campo o bosque: la variedad de formas y colores de cada planta y la armonía de diferentes especies y sus cambios a la largo del año.
- Inevitable cesped
La alternativa del césped la contemplan casi todos los jardines, ya que es uno de los elementos más importantes de este. Su color es relajante para la vista y su alfombra de mullida hierba incita al descanso. Tupido y arreglado contribuye a mejorar el microclima.
Además, las superficies cubiertas de césped cumplen la función de unos elementos arquitectónicos porque constituyen un magnífico fondo decorativo que hace resaltar los macizos de rosales, los árboles ornamentales –aislados o formando bosquecillos- y destaca las tonalidades cálidas de las plantas con flores.