En la provincia de Cáceres, cerca de la frontera con Portugal se encuentra esta maravilla. Un antiguo establo convertido en una lujosa casa, que se integra en el entorno a la vez que contrasta con él.

La casa está orientada al sur, lo que junto con sus grandes ventanales y contraventanas de madera hace que necesite muy poca energía para calentarse.

Como se puede apreciar en el vídeo, se aprovecha un pequeño rio cercano para el agua y también para generar electricidad en invierno con una pequeña turbina, cuando no hay suficientes horas de sol para que los paneles trabajen a máxima potencia. Gracias al bajo consumo de la casa, estos pequeños paneles y la mini turbina son suficientes.

Otra de las cosas fascinantes que se pueden ver en el vídeo, a parte de un entorno absolutamente privilegiado, es cómo juguetea la luz con el interior. Un pequeño estanque en la parte sur de la casa permite que los reflejos del sol en el agua acaricien toda la estancia.

Desde luego, es dificil no enamorarse de un sitio como este.