Hoy, debido a la crisis económica que existe en España se ha vuelto muy dificultoso encontrar financiación, aunque el lugar que vive el comprador en estas circunstancias siempre tendrá más ventajas que el vendedor a la hora de la negociación. Podemos decir que el comprador tiene más lugar para poder negociar, y el propietario no tanto como hace algunos años. El viejo recurso de “debe decidirse cuanto antes porque tengo tres interesados más” ya no rige por estos días.
Así y todo, un comprador solvente, que posee ahorros y sin necesidades de financiación, pueden encontrarse en su panacea y ver esta situación como una gran posibilidad de inversión; pero así y todo hay muchos puntos a donde deberá reparar y ser muy cuidadoso para que su negocio sea redondo y sin traspiés. A continuación algunos consejos para aquellos que desean comprar inmuebles sobre todo en Guadalajara y zonas aledañas.
Siempre mejor recurrir a inmobiliarias
En esta situación, aquello de lidiar con el propietario directo ya no se recomienda demasiado. Una agencia siempre tendrá no sólo más experiencia profesional, sino que llevará un orden indispensable, puntualidad, y además podrá orientarte a la hora de realizar una oferta, ya que si bien se beneficia con tu compra, además necesitan ganarse tu confianza para futuras transacciones. En este sector la competencia es descomunal, por eso intenta siempre recurrir a profesionales serios y experimentados. Empresas especializadas como http://albeda.es/ siempre son una buena opción para asesorarse.
Estudia el mercado
Además de asesorarte con grupos expertos infórmate por tu cuenta acerca de los precios que se manejan en el mercado, sobre todo en la zona donde deseas comprar. Ve a visitar diferentes viviendas, habla con particulares e inmobiliarias, sólo a modo informativo para ir empapándote de datos y comenzar a tener más parámetros; de esa forma estarás mucho mejor plantado cuando tengas que decidirte y realizar la transacción.
Averigua la urgencia del vendedor
Esto te dará cierto margen para poder negociar, cuánto más necesite el propietario vender su inmueble, más abierto estará para escuchar ofertas. Cuando te topas con una casa que lleva mucho tiempo en venta, ten cuidado: puede ser un signo de que algo no va bien, o que el vendedor no aceptará cualquier oferta.