Las paredes, lienzos en blancos en nuestra vivienda que están esperando a ser decorados, ya sea con pintura, papeles pintados o fotomurales. En esta entrada os vamos a hablar de esta última opción, ya que como veréis a continuación, por sus características es una de las mejores posibilidades.

Los fotomurales es una opción a tener muy en cuenta si queremos decorar una habitación de forma rápida, sencilla, sin ocupar espacio, barata y a la vez sin perder nuestra personalidad. Son similares a los vinilos y son adhesivos que suelen ocupar una pared entera.

Hay gran variedad de diseños: podemos encontrarlos de paisajes, infantiles, geométricos, incluso personalizados con una de nuestras fotos favoritas. Con estos diseños podemos jugar con las perspectivas y formas para lograr que la estancia sea más luminosa o más amplia. Además, es una opción que se puede usar en cualquier estancia del hogar, tanto dormitorios, cocina, sala de estar… Incluso se puede usar en tamaños más pequeños y elegirlo como cabecero de la cama.

Los fotomurales los podemos colocar nosotros o contratar profesionales. Por si queréis hacerlo vosotros mismos ahora que estamos en verano y tenemos más tiempo libre, desde Bonita Decoración os vamos a dar una serie de pasos a seguir para lograr un resultado espectacular:

1- Preparar la pared

La pared tiene que ser lisa (si hay agujeros, primero taparlos con masilla) y limpia. Este paso es, sin duda, el más importante de todos así que no tengáis miedo en tardar mucho tiempo en dejar la pared perfecta.

2- Colocar el fotomural

Se comienza a pegar por las esquinas superiores yendo hacia el centro, con mucho mimo y cuidado. Nos podemos ayudar de una brocha o de un rodillo para que no queden burbujas. Es el paso más delicado del proceso y como en el anterior, no tengáis miedo a tardar, ya que una vez pegado no se podrá despegar.

¿Os gustan los fotomurales?